No podemos evitar leer, escuchar y ver la situación de violencia que pasa nuestro país. En las noticias, en los periódicos, el radio, las redes sociales, a todas horas se escucha hablar de cómo la violencia azota calles y en ocasiones estados completos, de los cuales las personas prefieren huir que vivir un minuto más la violenta realidad a la que el gobierno nos ha condenado. Secuestros, violaciones, balaceras, decapitados, descuartizados entre otras barbaridades dignas de películas de terror son la realidad mexicana, siendo notorio también el impacto de la violencia en la economía de México.
Las costumbres, la forma de vida, la confianza, la seguridad y la tranquilidad de los habitantes de México se ha visto quebrantada desde hace ya mucho tiempo por la ola interminable de violencia que ha venido azotando desde hace años al país, lo que ha provocado que muchas personas que vivían en sus estados hayan decidido irse, creando pueblos fantasma en los que no solamente la vida se va a la quiebra, sino que hasta los negocios mejor establecidos conocen su muerte entre este terrible ambiente de violencia.
Según un estudio realizado por el Instituto para la Economía y la Paz, se han visto profundos daños a la economía mexicana debido a la violencia; estos daños ascienden a los 4 billones 392 mil millones de pesos por año, esto por la falta de inversión y turismo.
Este impacto de la violencia en la economia se encuentra sujeto a más de 60 indicadores entre los que se pueden encontrar como los principales la pobreza, los gastos en seguridad privada, las pólizas, la corrupción, inversión en tecnología y caída en la actividad comercial, esto debido a un pésimo entorno social que impide que los comercios progresen y logren establecerse de manera permanente.
La ineficacia gubernamental y del Sistema Judicial y el pobre estado de Derecho obliga a los negocios y a los turistas a pensar dos y hasta tres veces antes de pensar en establecer un negocio en este país o pasar unas vacaciones en alguno de sus estados.
El costo de la violencia en el país es un tema muy importante también, ya que por cada ciudadano tendrían que aportarse 37 mil pesos solamente para frenar la impactante ola de violencia; el costo total de esta acción es similar a duplicar los fondos que se destinan para salud y educación.
Tristemente, México es un país con un gran potencial para ser un país desarrollado; cuenta con los recursos naturales necesarios y la capacidad intelectual para explotarlos, sin embargo la violencia y la corrupción gubernamental merman este desarrollo.