¿Estás pensando en entrar a la universidad, pero no sabes cómo financiar tu carrera? Hoy te contaremos cinco mecanismos con los que podrás pagar tus estudios universitarios, o bien, un posgrado, diplomados o viajes escolares.
Programa Nacional de Financiamiento a la Educación Superior
Es un programa que ofrecen algunas instituciones bancarias y universidades privadas a lo largo del país, en conjunto con Nacional Financiera (Nafin). Es un crédito que otorga un máximo de 215 mil pesos para licenciatura y 280 mil para posgrados. La tasa de interés no es de más del 14% y es determinada por el banco involucrado con el crédito.
Los pagos pueden extenderse hasta por 15 años, iniciando desde el momento en que otorgan el préstamo.
Para solicitarlo, debes asegurarte de que la universidad que te interesa participe en el programa. Eso sí, deberás mantener un promedio mínimo de 7. La principal ventaja es que el dinero se entrega directamente a la universidad y los pagos son asequibles mientras estudies y por un periodo después de la graduación.
Programa educativo de INFONACOT
Las personas que ya trabajan y quieren tener una segunda carrera pueden acceder al crédito INFONACOT, siempre y cuando la empresa donde laboran está afiliada al instituto. Asimismo, la universidad debe tener convenio para que puedas aprovechar el crédito que tiene un máximo de 500 mil pesos, con una tasa interés anual del 14% y un plazo máximo de pago de 12 años para licenciatura y 9 años en posgrado.
Fondo para el Desarrollo de Recursos Humanos (FIDERH)
Se trata de un fideicomiso que administra el Banco de México y que cubre colegiatura, manutención y seguro médico. Para estudiar en México, el préstamo es de hasta 150 mil pesos anuales y 200 mil para estudios en el extranjero. Sin embargo, las condiciones son más estrictas ya que los plazos de pago son de 9 meses para estudios de especialidad, 24 meses para estudios de maestría y 36 para estudios de doctorado.
Créditos estudiantiles
Si bien no es la opción más asequible, es la más flexible y fácil de obtener. Los créditos educativos tienen una tasa de interés similar a la de un crédito bancario, pero pueden obtenerse sin la necesidad de convenios entre bancos, fideicomisos y universidades.
Además, son préstamos que van dirigidos al estudiante, no a la institución. Por ello, pueden usarse para pagar la titulación, un diplomado, un viaje escolar, para comprar material de estudio o de práctica.
Al elegir un préstamo estudiantil puedes usar un simulador de crédito en línea para calcular el costo anual total, la tasa de interés y los intereses, de modo que calcules el monto de los pagos mensuales y el total a pagar con tu préstamo.
Elige la opción más conveniente para tus necesidades y tu bolsillo.