¿Eres de los que llega al fin de quincena buscando todas las monedas posibles para juntar para el pasaje o la gasolina? o quizá eres de los que ya no tiene ni para la comida del día que con una lata de atún le basta, si ese es tu caso tenemos que decirte que no estás solo.
De acuerdo con una encuesta reciente de plataforma digital Kardmatch el 59% de los mexicanos no tiene para finalizar la quincena y tiene que hacer uso de tarjetas de crédito para poder cubrir sus gastos.
Los mexicanos utilizan la tarjeta para pagar diferentes productos y servicios, pero entre los más concurridos es para la compra de víveres, de acuerdo con la encuesta el 67% usó la tarjeta para pagar en un supermercado, el 16% lo hizo para cubrir gastos de salidas y restaurantes, el 6% para el pago de servicios como internet, telefonía, agua o luz y el 10% restante en otros gastos como pago de colegiaturas, medicamento, roa o gasolina.
De acuerdo con la plataforma este comportamiento es muy preocupante ya que los consumidores están utilizando las tarjetas como parte de la extensión de sus ingresos y además pagan impuestos por gastos que no deberían ser así financiados como la comida, lo cual refleja una importante falta de cultura financiera.
La encuesta también reveló que esta conducta no sólo es propia de las personas con salarios bajos, ya que se presenta en todos los niveles socioeconómicos.
Para evitar continuar con estos endeudamientos que ponen en peligro las finanzas personales y familiares de miles de mexicanos se recomienda utilizar de manera inteligente las tarjetas de crédito, una manera sencilla para lograrlo es utilizar dos tipos de tarjetas.
Por un lado tener una tarjeta de uso diario donde se le cargue el saldo necesario sólo para los gastos del día como comida, teléfono, gasolina, etc. De esta manera se podrá tener un control de lo que se compra y evitar el gasto hormiga si sólo se anda con “lo necesario”.
La segunda tarjeta es para pagar a plazos y deberá tener acceso a meses sin intereses, en ésta podrán cargarse compras que se tengan que hacer a plazos como es la adquisición de electrodomésticos, viajes o una emergencia médica.
Con esta división se podrá tener un mejor control de los gastos personales y se evitará el endeudamiento innecesario.